Por Natalí Zamora. Socia EPSPA
Recientemente la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires reconociendo que su rol principal es el dictado de sentencias con perspectiva de género entendió que, si su objetivo es consolidar una vida sin violencias debía avanzar con nueva líneas de acción y por ello dispuso mediante el acuerdo 4032 la creación de la Comisión Permanente en materia de Género e Igualdad otorgándole a este órgano funciones de índole consultivas.
Para ello, se estableció que la integración debía ser colegiada nombrando un representante de cada dependencia de la Suprema Corte con injerencia gremial y sindical, designando para ello a un miembro de la SCBA; uno del Colegio de Magistrados y Funcionarios del Poder Judicial; un representante de la Asociación Judicial Bonaerense y declarando al Relator de la nuestro más alto Tribunal como su Secretario.
La Comisión mediante la planificación institucional y en procesos internos buscará lograr la equidad tanto para quienes acceden al Poder Judicial como también para quienes se encuentran laborando dentro.
Específicamente el reciente acuerdo dispone que deberá diseñar protocolos y guías de actuación; Relevar y sistematizar sentencias; en relación al tratamiento de las problemáticas del servicio de justicia proponer y sistematizar buenas prácticas en materia de prevención, sanción y erradicación de la violencia de género. Asimismo, deberá darle seguimiento a los instrumentos de igualación que se pongan en marcha en el ámbito del Poder Judicial; proponer a la SCBA actividades de formación y capacitación permanente como así también implementar políticas concretas para poder cumplir con estos objetivos; celebrará reuniones con equipos técnicos y organismos no gubernamentales; podrá asimismo invitar a exponer sobre cuestiones de género a miembro del PE o PL provincial o bien convocar a participar como miembros invitados a los representantes del Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual y del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Provincia de Buenos Aires.
De esta forma, vemos como poco a poco nuestro más Alto Tribunal provincial se va adaptando a las necesidades actuales no solo del/la justiciable que acude al servicio de justicia sino también para quienes laboran dentro del Poder Judicial.
De momento será cuestión de aguardar para conocer a sus integrantes y sus propuestas. Pero sin dudas entendemos que este tipo de acciones son necesarias como puntos de partida para acompañar la erradicación de las violencias de géneros en el ámbito judicial a través de acciones específicas.
